miércoles, 28 de diciembre de 2011

welcome



Dame de eso, de lo que nos sobra o no tanto. De lo que gritan tus ojos y llena hasta rebosar los bolsillos de tu pantalón caido o la pajarita de tu frac.
De lo que me falta ahora por culpa de un capricho de la luna, que por querer alumbrar como el sol me lo robó en un suspiro y viajó por el cielo para formar una nube con textura de limón y sensación de chocolate.
Regálame una noche, amor mío, un poco de tu aire, tres latidos y dos cuartos de tu corazón que a cambio yo te daré un suspiro y el vaivén de las olas en el puerto. El sabor a sal en un beso o el susurro de una estrella de Pekín, y que nos cubra con su velo.
Y  si te pido concédemelo, que no será por capricho mi amor, levántate y bailemos sin ritmo. Cuando no me encuentres ve al país de Nunca Jamás y tráeme polvo de hadas que yo me encargo de poner la ilusión.
Dame mucho más, de lo que no te pido. De lo que fabrican en Yugoslavia, que no sé, que me apetece probar del pólen que recolecta la Abeja Maya y sentirme menos pesada.
Dame la mano y colémonos en un concierto de hardcore o en la ópera, sal al escenario y baila claqué solo para el deleite de mi sonrisa.
Y si te pido, repito, no es por capricho, solo  necesito más de ti.

domingo, 18 de diciembre de 2011

Make me real, bring me to life.



Las gallinas que entran por las que salen. Porque cuando algo acaba, algo comienza y lo reemplaza. ¿Quién me lo iba a decir?
He escuchado (y no digo oído) tantas veces esta canción que podría recitarla incluso en inglés, le he dado tantas vueltas a tantas cosas que podría bordear el infinito varias veces, he llorado y he reído hasta dolerme el alma (incluso a la vez). He sentido (demasiado) intensamente y he caído en la insensibilidad más absoluta. He gritado hasta que mis cuerdas vocales dijeran basta, y la voz se fuese sola, pero también me he quedado sin palabras y no he podido más que susurrarle al tiempo.
He sido valiente y he tenido fuerza y ganas para comerme el mundo, pero también cobarde por no atreverme a dar un paso sin mirar al suelo.
He sido comprensiva, y he juzgado de la forma más cruel. Aprendí a perdonar y ser perdonada, y me amaron, sobre todas las cosas, pero no supe amar.
Quise cuidar de mi misma y fracasé. Quise aprender y olvidé. Quise olvidar y perdí. Quise desisitir pero luché. Quise saltar y salté, para luego caer. Quisieron aliviar mi dolor y no les dejé.

Quise muchas cosas que no conseguí, y conseguí otras tantas sin querer. No sé, quiero querer(nos) de nuevo.
¿Quién me lo iba a decir a mi, que siempre he odiado los tópicos? Que me reinvento por navidad.
Que me enderezo, y vuelvo a ver el mundo boca arriba, que desafío a la gravedad.

domingo, 4 de diciembre de 2011

El arte empieza a serlo cuando inunda un corazón...

...y yo solo intento anegar el tuyo.
Porque hoy es el día, he cogido un cuaderno para volver a escribir fórmulas. La fórmula de la densidad, la de tus huesos cuando se calan de frío y la de mis labios cuando susurran un 'Buenas noches'.
La de la sonrisa, que es la más fácil: Aire puro por cosquillas elevados a la octava maravilla. Me gustaría darte la fórmula de la felicidad, pero la tiene Coca-Cola. ¡Que no es lo mismo malvivir que vivir mal!
Que malvivir es tener carencias físicas; materiales y de salud y vivir mal es no saber salir de ellas. Que no sé cómo te quejas cuando lo tienes todo y después te haces el humano fingiendo dolor sobre tópicos.
No te engañes, cada tres segundos muere un niño en África, pero no es un país pobre. Ni son todos negros ni están todos desnutridos. Que no deben darte pena, solo ponte en su lugar y luego quéjate de la capacidad de tu móvil.
En serio, detesto vuestros prejuicios. el que tu compañero sea homosexual no te convierte en un icono sexual. Que, igual que a ti, le gustará una persona con todas sus pequeñas cosas y no el primero que pase. Que rapero y MC no es lo mismo, y no caminamos como patos ni tenemos por qué llevar cadenitas. 
Que el Hip-hop es una cultura (como muchas otras), una forma de vida que se lleva dentro y que no se manifiesta solo en mis baggies. Que lo extranjeros no vienen a robar, inútil. Que buena parte de tus ideas son mitos, como la inteligencia de un CANI. 
¿Que hay sonrisas que levantan pasiones? Yo sé de besos que levantan otras cosas... la moral, no malinterpretemos.
Que tu novi@ no te quiere más si te pone en el 'nick', que las rubias no son tontas ni el cielo azul celeste. 
Venga, hazlo por ti, por tu perro Lucky o por tu pez (sí, ese al que "tienes que bañar" cada vez que te proponen un plan) y replantéate tus ideas.
No me juzgues tampoco, que conocer mi forma de mirar la vida no implica conocerme, que no te digo cómo debes vivir, , intento que dejes de vivir mal aunque vivas malviviendo. Y mientras tanto puedes contar conmigo, contar estrellas, digo. Que llevo en ello tres lustros y no acabo.
¡Ojo!, que como dice la canción 'yo tampoco sé vivir, estoy improvisando'. Solo vivo, bien-vivo y no me permito vivir mal, suena bien, ¿no?
                                    Y desde ahora hasta que me muera tú dame un bolígrafo y regálame una sonrisa, que yo intentaré compartirla contigo y seguir escribiendo, a mi manera.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Que ni tú eres mía ni yo soy tuyo.



- Podríamos haber estado juntos, te quise mucho. 
- Lo sé. 
- Pero tú no... tú no me correspondías.
- Te amaba.
- ¿Cuál era el problema entonces? -un poco tarde para preguntarlo.
- Que también quería a otra persona.
Una chispa en sus ojos. - ¿A quién? 
- A mí misma.
Ven si tienes planes

lunes, 14 de noviembre de 2011

Os vais todos a la mierda, pero solo un ratito.

 
Ellos no saben las cosas que vivimos, si me caigo solo me levantaré. (...) 
Miedo al qué dirán ahora tiene el que critica, vas a empezar a sonar más potente cuando la boca se te haga más chica. 
Pregúntaselo a mi sombra que conmigo siempre ha caminado. Mi sombra, sí, la que va detrás de mi, ¡eres un tipo tan arrogante que hasta tu sombra habla mal de tí!

sábado, 12 de noviembre de 2011

Tiempo para reflexionar.



Intentar hacer como si no existiesen o no darles más vueltas. Y lo conseguimos, puedes dejar de lado tus propios problemas pero ten claro que, antes o después, volverán.
Quizá la aparición de un nuevo rompecabezas traiga consigo los restos de todos los puzles que dejaste a medias. O una palabra despreciativa de cualquiera debilite hasta la expiración tu aparente seguridad y te conviertas de nuevo en un ser débil que desconfía del resto porque, no a falta de motivos, se siente juzgado.                                                                                                                
El desencadenante puede ser aún más simple; una canción, una mirada, un suceso que te produzca un déjà-vu, un gesto... Siempre vuelven y para entonces no hay tregua concebible.

Y ya puedes probarlo todo, pero subir el volumen de la música hasta que te duelan hasta las antenas del caracol del oído izquierdo no conseguirá sepultar lo que se cuece en tu cabeza. Y aquí viene la primera y más básica de las cosas que deberíamos hacer; encontrar tiempo para pensar. Pensar en tu entorno y, para callar tu ego-conciencia, un poco en el resto del mundo.                                                                                                                                        Recuerda que nadie es quién para juzgarte así que me limitaré a mencionar aquellas cosas que, considero, justifican sobradamente el esfuerzo invertido en ellas.

Merece la pena apagar en móvil y pensar en qué es de ti y tu felicidad; madrugar para ver amanecer o dormir fuera para observar las estrellas. Salvar cualquier distancia merece la pena si al otro lado te espera alguien que te ama con locura; incluso llorar en una despedida tiene su valor si esto demuestra lo mucho que vas a echarle de menos.
Pasar una hora de pie, entre gritos de padres pseudo-adultos merece la pena si es para ver a tu sobrino jugar el primer partido de la liga pre-benjamines. Independientemente de si pierden o ganan con siete de diferencia.    
Tal vez solo ha sido un dia raro y mañana todo esto me importe tanto como que en este instante está germinando una semilla en algún rincón del mundo, pero sé que tengo que organizar mis prioridades y partiré de una certeza: Querer merece la pena. Pese al daño y a la limitación del amor en el tiempo. Solamente por lo que con cerrar los ojos podemos imaginar cuando amamos y por esa sensación de ingravidez, amigo mío, ¿quién no sabe volar entonces?

Especialmente hoy soy consciente de la importancia del aprendizaje para la VIDA propiamente dicha, ya sabes, ese conjunto de experiencias a lo largo de un puñado inestable y terriblemente finito de minutos, porque esta misma noche un libro me ha enseñado que en la vida hay cuestiones que simplemente merecen la pena.

jueves, 3 de noviembre de 2011

El universo y tú, tú, mi universo.

Llegar a casa, vomitar y un vaso de agua. Siete lágrimas y a la cama. Abro un ojo y miro a la ventana, amanece el día con su luz templada. Primera mañana de invierno, tengo frío, tengo frío en el alma.
       Vuelvo a dormirme y te sueño, sueño como te desnudabas, sueño que vuelves con tus palabras y que vamos a hacerlo todo, todo lo que yo quiera porque eres mía y todo lo que desees porque tuya es mi cama.
No sé si estoy dormido o drogado pero no quiero moverme de esta sala.
Cuanto te quise, tanto te di. Cuanto te amé, tan poco me amabas.

     Deliro al no topar con tu mirada, al buscar mis labios tu piel y regresar sin nada.
Te me has llevado contigo, me has robado las ganas. Décimo cuarta tarde de invierno y qué helado me siento, que vacío has dejado.




El universo nos quiso mirar y vernos infinitos, pero tú ya no estabas.

martes, 1 de noviembre de 2011

Aujourd'hui, ça commence avec toi.



 Pequeña mía, te miro y te veo tan feliz que casi te envidio. Te observo sonreír resplandeciente cada mañana cuando mamá te despierta con una canción y no entiendo cómo no supe apreciarlo; me entristece pensar que pronto preferirás el monótono sonido de un puto reloj o la melodía de tu móvil.
Te veo desplegar tus encantos de bebé con cualquiera que te digna una sonrisa, alzar las manos desde tu cuna esperando que alguien te rescate de tu pequeña cárcel de metal. Y así discurren todos tus días, y si algo te ocurre no tienes más que llorar; llorar de hambre, porque te sale el tercer diente o porque echas de menos a papá. Llorar despacio o llorar fuerte para protestar.
Y por la noche te observo regresar al efímero letargo de tus sueños y vuelves a parecer un ángel, que lo eres y no quiero que salgas nunca de ese mundo, permanece ahí tanto tiempo como puedas porque al despertar, mi pequeña, al despertar no hayarás más que soledad.
Te darás cuenta de que los cuentos no son como te los contaban y no te dejarán cambiar la realidad. Y si lloras deberás hacerlo en silencio para no molestar. También habrá gente que desee tus lágrimas, no los dejes saber, no los dejes ganar.
Descubrirás que no hay príncipes azules ni princesas a las que amar, dejarán de cantarte canciones y solo quedará luchar. No quiero toda esta mierda para ti y por eso protesto aunque me hagan callar. No permitas que te obliguen a asentir, asegura tu libertad.
Pero aún es pronto para ti, por ahora solo regálanos tu preciosa sonrisa. Descansa, pequeña mía, duerme, no dejes de soñar...

lunes, 31 de octubre de 2011

13

Para los Halloweeneros, para los que creen que cualquier excusa es buena para ir de fiesta, para los alegres, para los deprimidos, para los que se aburren y los que lo pasan en grande, para los incrédulos y los creyentes ¡Incluso para los tradicionales! Para los que salen para olvidar, para matar el tiempo y no pensar y los que intentan recordar viejos tiempos disfrazándose de calabaza. Para los impulsivos y los reflexivos, para los que beberán para no pensar o viceversa. Para ti, sí, tú, que sé que lo estás leyendo.

Feliz día, para quien lo tenga.

sábado, 29 de octubre de 2011

atrás

Busco una canción que me diga algo, un amanecer más azul, un atardecer menos melancólico. ¿En qué momento nos hicimos fuertes? ¿Cuándo aprendimos a tragarnos las lágrimas? ¿Volverá el revolucionario?
Aquello que encontré cuando dejé de buscar. No se puede congelar el hielo, no se puede y no es culpa tuya.
 Busco una canción que me diga algo, un amanecer menos naranja, un atardecer más fresco. ¿Cuándo dejamos de amar? ¿En qué momento nos invadió la indolencia? ¿Piensas volver?
He recaido, he vuelto a escuchar aquella canción, y otra, y muchas más. De las que cantábamos de camino a la playa, pero no me dijeron nada.
Aquello que encontré cuando volví a buscar. Y ya nada puede derretir mi hielo, nadie puede, y no es tu culpa.
Abrí aquel álbum y examiné cada una de las fotografías esperando al dolor en cada página. Recorrí con la yema de mis dedos congelados la duodécima. Hayé el vacío que dejaste y encontré una carta.
Busqué en una canción tus palabras. Sepulté el tiempo que pasamos juntos, perdóname por  no ser valiente, por tardar en encontrarte. Me he aprendido tus letras y puedo escuchar la música en ellas.
(...)
No hay frío ni calor que valga,
ni orgullo que me frene.
¿Cuándo dejamos de escucharnos?
Aprendí a querer una vez, vuelve a enseñarme.
Nunca más volveremos a contener el llanto,
¿vas a volver? Te esperaré.
Estaré aguardando, seguiré cuidándote aunque no me necesites.
Te quiero, ¿me creerás algún día? Tal vez cuando abras nuestra historia por la página doce y veas que esto ocupa el lugar de tu foto preferida. Perdóname, necesitaba sentirte cerca.


El tiempo es infinito y tú eres mi reloj.

jueves, 20 de octubre de 2011

Vodka y valeriana

El reputado suicidio de los pobres.   -love suck-

05:22h. Sniiiiiif,snif, ¡no me quiere! Nah, es broma.
05:24h. ¡Qué capullo, ¿no?! Sí, es más yo.

Nada mejor que una noche en vela y silenciosa para quemar mi última neurona, pero si no hay otro remedio...
¿El alcohol cura? Nah, seguro que no, además todavía no soy tan imbécil, el vodka no va a cambiar esto.  Y dormir... ¡dormir está sobrevalorado! , total, si iba a soñar casi mejor quedarme despierta que el boli me estaba llamando.

Bueno, es verdad, desde hace tiempo (si es que no ha sido siempre así) mi blog está dejando mucho que desear y me he vuelto una inconstante. A los pocos que me leen con asiduidad os compensaré, prometido.
He de decir que mi ausencia no se debe a un bloqueo ni nada por el estilo, de hecho este texto no es más que uno de tantos que reposará (o habrá reposado para cuando tú lo leas) durante bastante tiempo en la susodicha carpeta. Preparaos, amigos mios, porque cuando vuelva habrá mucha carne fresca esperando a ser despedazada por vuestras opiniones. Que al fin y al cabo para eso publico, con la esperanza de que os toméis la libertad de soltar lo primero que se os pase por la cabeza (que suele ser lo más sincero y destructivo) y os carguéis, ya de paso, ese eco de ego tan de todos que en ocasiones de deja sentir.
Intentaré dormir. Pero reconsideraré lo del vodka.

Buenas noches, tardes o días mi querido lector, ¿sabes? No estaría mal que leyeses, sí, justo ahí. Un poco más abajo, un poco más... ¡Exacto! Ahí dónde comienzan las demás entradas. Y no olvides dejar tu huella, me conformo con saber que estuviste, un simple: Pepito was here.

P.D. El cielo sigue siendo de colores y mi alma sigue pagando el precio.
(Siento publicar todo esto a bocajarro, no sé cuando volveré. Así tenéis qué leer para rato)

di no a la presición del digital

tic, tac, tic, tac, tic, tac, tic, tac, tic, tac, tic, tac, tic, tac, tic, tac, tic, tac...
asddfdjndfhbdassisjdnjkldoshfbdhdmfujdehnbsnmomerfdisfbndbfryhjnskm
Me pone histérica esa maldita relación entre el tic y el tac en la que uno va siempre seguido del otro, el tic con su tac y viceversa.
Si la pila se acaba desaparecen, como no, juntos.
Por mucho que todos odiemos el dichoso ruidito de las manecillas ellos continúan su permanente marcha, incansables.
¿Quién narices dijo que había que ser como el viento? El viento está solo.
Yo quiero que seas el tic de mi tac, ya sabes, que constituyamos la esencia de un reloj analógico y todo eso de la unión hasta el fin de los tiempos, cuando muramos a manos de un mal madrugador.

Has de saber...

Que todo lo dicho está muy oído y lo escrito permanece siempre como eco de la memoria.
Que ya puedo cantar misa o tempestades que sonrará a corta-y-pega y eso si que no.           
     Vida mia, 
que sobre amor está todo más que dicho, los te quiero están muy gastados y en la luna no están tus ojos.                                                                                                                                                                         Lo  tuyo lo tienes tú, pero yo guardo una copia de seguridad en algún rincón del cielo. En la esquinita doblada que señala hasta dónde he leido tu libro.                                                               
  Pero tampoco estás en él o yo no te siento. Y como así no tiene gracia no lo vuelvo a abrir mientras no me beses el cuello.

viernes, 30 de septiembre de 2011

-uta

Había sido John; el hermano y el hijo excelente. John gran defensa y delantero inigualable. John jugando a fútbol, John y sus primeras palabras: "abuá" que hacían referencia a su venerado abuelo. John llorando su pérdida y después John reincorporándose a la vida.
Siempre John. John y su amigo borja que lo llama "J", jota, de John. John adolescente, y su primer día de instituto, John creciendo, John más que guapo.
John aceptando la pastilla que le ofrecen a Borja, John yéndose con ella. John y su primera vez que no puede recordar y después, John arrepentido.
John atendiendo más a sus piernas que a la profesora de Italiano. John sonriente, John recibiendo una bola de papel de Borja. John enfadado, aún más guapo si cabe.
John chocando conmigo y ayudándome a recoger los libros; John disculpándose sonrojado. John prometiéndome una recompensa, yo soñando con John. John me ha visto.
Recuerdo que era invierno y veo a John invitándome a una taza de chocolate, y otra, y muchas más. John encantador. John paseando conmigo de la mano.
          Empieza el calor y John me invita a helados; John y yo hablando, contándonos nuestros sueños sobre la hierba de aquel lugar, Joh sonriendo mientras pronuncia un 'te quiero, John más y más cerca, John y nuestro primer beso.
John conoce a "P-" en una fiesta, John se acerca a ella y "P-" sonríe. John pasa la noche conversando con ella. Mientras, no suena el teléfono y se hace raro, es la hora. Dos en punto, casi. 02:02 h y un minuto más, pero John no se retrasa, solo ha olvidado llamar. Y John sueña con "P-" esa noche.
La lleva al cine, al teatro, al parque... Perdón, a nuestro parque.
John está distante con todos, John enamorado de "P-".
John tomando los labios de alguien que no soy yo. John me lo cuenta todo, el brillo de sus ojos ha cambiado pero igualmente es él, John.
"P-" lo aleja de mi y del resto del mundo: John ama y John consiente. Hace semanas que no sé de John y John cambia.
...'¿Por qué no te das cuenta, John?'...
Pasan meses y John es John solo para mi y Borja.
John el que jugaba a fútbol, John sigue siendo guapo, John que ya no es "jota", y lo que es peor: John sombra de "P-"
Y entonces me siento jodidamente mal, pero no ha sido mi culpa, has sido tú... O lo que queda de ti en <<Johnny, el novio de "P-">>
Que sepas que odio esas malditas "N" e "Y" al final de tu nombre. Me han dicho que es cosa de "P-".
          John, yo no quería esto; no quería la quería a ella para ti, bueno, tenía que ser yo, ¿no lo entiendes? Ella quiere a Johnny. Te ha eclipsado, John, pero yo sé que sigues siendo tú. Conmigo.
Y te busco, ¡te estoy buscando! A ti, siempre a ti, John. Por mi, por quienes éramos juntos. Por aquel John: encantador, tímido y torpe, sencillo, hermoso como ninguno, sincero... Tan solo dame una respuesta. ¿Dónde estás, mi amado John?

domingo, 18 de septiembre de 2011

Apenas has dicho hola y tienes que decir adiós.


 Llega el final de esos días en los que el azul del cielo es más turquesa que pueden (o no) ser tus preferidos, seguidos de esos otros en los que podemos ver todos los colores formando fila en un hipotético techo encapotado.
Unos u otros en los que sonríes por cualquier cosa, pero desde el alma. Porque esa es la verdadera alegría, la que se transmite.
Y sí, se nos acaba el verano pero no es momento de lamentar pérdidas, sólo de hacer balance.
Todo lo que has vivido, quienes se han ido (agradecer) que han dejado sitio a otros.
Esos amigos que digievolucionan entre besos más o menos improvisados en las mañanas, tardes y noches de los meses más cálidos.
Sol que tuesta o achicharra, crema solar que pringa, la mirada  de aquella chica en la piscina, alguna lágrima porque te entra "algo" en los ojos, claro está. La canción del verano y cuántas veces la has oído. El calor entre el gentío, horas haciendo nada y semanas en las que apenas has pisado tu casa. Noches especialmente estrelladas pasadas entre caricias.

Se acaba.
Total, ahora viene la primavera o el otoño, ¿qué más da? Si te apetece puedes hacerte un phineasyferb e inventar una nueva estación.
Lo hagas como lo hagas recuerda que tú decides cómo quieres sentirte. Que no importa su llueve o no, si te hielas o te cueces; disfruta, canta, susurra, salta, ríe, piensa en verde, en rojo o en amarillo fosforito y luego comparte. Contágialo al resto, al nostálgico que se queja porque extraña hundir sus pies en la arena o a ella, que lamenta ir perdiendo el bronceado de sus largas piernas. ¿Acaso no merece la pena?
Traigo buenas noticias; en tiempos de crisis ser feliz sigue siendo gratis.

viernes, 16 de septiembre de 2011

Madrugadas.

Un tono, dos, tres. Lo coge. Parece aturdido, estaba dormido. Al fin y al cabo era de esperar. Lo siento, digo. No importa, responde. Y ríe, sin ningún motivo pero es genial. Lo despierto de madrugada y a cambio me regala carcajadas.
No te he llamado para decirte una cosa cualquiera, explico. Y él curioso pregunta. Ya no hay oportunidad de echarse atrás, tampoco estaría bien, no me lo perdonaría nunca. Le he dado tantas vueltas... Se lo digo y sonríe, o eso me parece. Y también esta me parece genial, algo más que algunos dientes (más o menos blancos) dejándose ver entre labios sonrosados.
E imagino que el colmo de la genialidad sería besar su sonrisa.
Intento recordar las palabras, aquel discurso exacto y elaborado. Aquel conjunto de letras perfectamente organizado. Y allí están, todas y cada una de ellas, trastornadas. Y con este desorden han perdido toda la sutileza ¡qué pensaría mi madre! No, definitivamente prefiero no pensar en eso.
Espera paciente a que me pronuncie. Tal vez haya dicho algo, en tal caso no me he enterado. Me decido, respiro hondo una vez, dos. Suspiro y sin titubear digo:
"He imaginado que hacíamos el amor y ha sido fantástico"
No duda, responde esto y lo otro, parece divertido pero no lo tengo muy claro. Y se acabó, ya está, ha salido bien.  Y sonriendo pongo mi particular punto y seguido. Me dejo llevar, me pierdo en su voz.

martes, 13 de septiembre de 2011

Entiende que

Calleron algunas lágrimas por ti,
pero da igual porque es algo que tú nunca sabrás.

lunes, 12 de septiembre de 2011

Matices de conexión.

Me secaba las lágrimas y me besaba el cuello; me recorrían una y otra vez sus ojos, arriba y abajo; y así me desnudaba, único, abandonando el uso de las manos.
Por quitar me quitaba hasta la respiración para después descubrir, también él, su alma.
Lo abrazaba fuerte, le contaba el por qué de mis lloros y él me miraba de nuevo, me recorría y después me acercaba a si haciendo que me sintiera suya pero dueña de mi al mismo tiempo. Me abrazaba y, conectados, solo nos sentíamos el uno al otro.
Hablaba tan bajo que parecía no querer decir nada concreto, solo hacer notar su voz y, muchas veces, sus palabras quedaban inconclusas cuando él se cansaba de no poder evitar interrumpirlas con suspiros.
Acercaba su cara a la mía y, sollozando o no, gemía, y él respiraba mi dolor haciéndolo suyo para que yo me sintiese bien o al menos sosegada.
Entonces aquel sentimiento que hubo sido mio resbalaba por esos ojos seguros que antes me habían examinado y le bañaba el rostro mojando descarado su mentón de terciopelo, resbalando.
Y entonces yo, haciéndole saber, le besaba las lágrimas y le secaba el cuello.

viernes, 9 de septiembre de 2011

cosasquenosonparasiempre,simplementeinfinitas ∞

- Te lo puedo hacer fácil, o más complicado. Te puedo decir te quiero y no demostrarlo, o hacer esto. Así que sin más, seré sincero. Este es mi amor por tí: 

+ ¿Ocho

- Acuéstalo.

jueves, 8 de septiembre de 2011

A VER GENTE ES IMPORTANTE

NO SE TARDA NADA Y NO HAY NINGUN TIPO DE COMPROMISO! Pasaos y firmad, es contra el cierre de una protectora de animales en Cádiz, se necesitan solo hoy diez mil firmas y no llegamos a las cuatro mil, por favor, pensad que es menos de un minuto y podéis ayudar a que no maten cientos de animales.

http://actuable.es/retos/firmad-contra-cierre-la-protectora-luz-luna

miércoles, 7 de septiembre de 2011

Escribe, Alicia, escribe. (segunda y última parte)

En fin, MIEDO.
...
Cinco letras, como amor, pero tan diferente. Diferente no quiere decir desvinculado, también se puede tener miedo a querer. Yo no tengo ese miedo, creo que lo perdí con él hace un año. Miedo; desmotivando madres desde tiempos inmemoriables, porque ellas se pasan la vida intentando que nos abriguemos-no importa si hace o no frío- pero solo él puede hacer que te tapes hasta el cuello en pleno agosto. Verídico, ya sabes. Como la vida misma.
Miedo a la oscuridad si no es en compañía, miedo a empezar y luego miedo a que se acabe. Miedo a  la distancia y el tiempo, y miedo-absurdo- al reencuentro. Miedo a que nos mientan, temiendo también la verdad. Miedo al día de las notas entre los estudiantes de mi instituto.
Miedo al prefijo in-: felicidad, fidelidad, cultura, dolencia, adaptada. ¿Seré una inadaptada por no comprarme unas Vans? Supongo que me resbala. Antisocialita no more. Desfaso.
Miedo a las arañas y a los reptiles, en especial a la cobra. Ahí lo dejo. Se admiten interpretaciones en los comentarios.
Miedo al cambio y al estancamiento, miedo a no ser original y miedo a que nadie lo entienda.
En ocasiones pienso que miedo a la inteligencia es lo que tienen homófobos y racistas.Vuelvo a pensarlo y me doy cuenta de que no son más que unos enfermos.

Miedo a la primera vez de algo, y a la última cuando sabes que va a serlo. Miedo al dolor y a no sentir nada.  Miedo a qué dirán y a pasar inadvertido. Miedo a la soledad pero también al compromiso. Miedo.
Sé que tienes miedo pero ¿en serio crees que tus sábanas van a salvarte? Miedo a vivir sin saber hacerlo y a morir. Miedo al intento y a sus posibles consecuencias.  Miedo a ser tú mismo e impotencia cuando te das cuenta de que no lo has sido en mucho tiempo. Miedo a la libre expresión en todas sus ramas.
Miedo que hoy muchos no pueden sentir porque un buen día pisaron una mina y saltaron por los aires sin saber de que iba la cosa.Y miedo también en los ojos de esa mujer que sobrevive como puede a los golpes de su marido.
Miedo a los aviones y miedo a que un irresponsable pueda segarte la vida en una carretera.
Miedo a decir 'te quiero' y no ser correspondidos. Miedo a odiar y ser odiados. Miedo al entorno y al indigente.
Miedo al miedo, dicen. Y yo respondo que eso es miedo al cuadrado
-y así nos va-.

jueves, 1 de septiembre de 2011

Escribe, Alicia, escribe. (primera parte)

¿Tienes algo nuevo?
Me gustó la última entrada.
¿Por qué nunca llegó el segundo capitulo?
Tu nuevo fondo sobrecarga.
Dios, que pastel.
Demasiado bonito o demasiado típico.
Asco de blog, arg.
101 seguidores, como los Dálmatas, es lo único que se me ocurre a estas alturas.
Creo que estoy perdiendo la esencia. Fuck this shit.
Escribe, Alicia, escribe.
Bien, voy a publicar algo... Aquel texto que... ay no, ¡qué pastel! Y el de la reflexión... demasiado personal. Mordiscos, me gustaba mucho aquel, sí, creo que pondré ese. Lo leo. Bien. Me da pereza pasarlo, soy un despojo social. Escribiré algo nuevo, seh, optimista. Venga, tienes que hacerlo. Sonreír, vaya palabra, ¿no? A ver... piensa, Alicia, piensa. 'Su sonrisa... emm... su sonrisa se ocultaba tras... em, ¡qué narices! Su sonrisa era de acero y blanca porque usaba Colgate' No lo veo eh. No lo veo. Inventa, Alicia, inventa. Es la música la que no me deja pensar, la quito. Nada. Soy una mediocre. Los hombres que no amaban a las mujeres me ha desmoralizado. Lisbeth, Lisbeth, Lisbeth, Harriet, Harriet muerta (?), Harriet desaparecida.
Céntrate,Alicia.
¿Cómo se piensa cuando quedan trece días para volver a verle? No se puede, no se puede. MIEDO, claro, miedo. Miedo es otra gran palabra. ¿Recuerdas? Hace un par de noches pensaste en eso... Miedo, miedo, miedo. Insidious, ¡Insidious NO DA MIEDO, joder! No sé que les ha dado con eso ahora... ¿Él la habrá visto? No creo. Trece días, dicen que da mala suerte, me da lo mismo. Trece trece trece ¡trece! 
En fin, MIEDO.

sábado, 27 de agosto de 2011

Será la luz del sol (oladesusojosperoesoeraunsecreto)

Ya no me siento tan diferente, ¿sabes?  A lo mejor yo también estoy lleno de hipocresía, tal vez tengo algo de todos esos a quienes juzgué e incluso critiqué por actos que puede que, involuntariamente, también yo cometo.

A lo mejor no soy especial, ¿comprendes? Tal vez mañana salga y beba, para no destacar o simplemente por no pensar (todo un clásico). Puede que al fin y al cabo, como en el anuncio, yo también esté dispuesto a todo por mis Golden Grahams.

domingo, 21 de agosto de 2011

amar amando al amante amado.

- ¿Por qué has dejado de hablar?
- Estoy llorando.
- ¿Por qué?
- Te echo mucho de menos.
- Guapo.
 - Te quiero, y nadie te puede querer así.
- ¿Sabes qué? ¡Te quiero de aquí a la Luna y volver!
- Yo hasta Marte en bicicleta.
- ¿Hasta el infinito?
- Y más allá...






viernes, 22 de julio de 2011

más o menos capicúa.

Hola, me llamo Pedro y de mayor quiero ser la ciruela más sabrosa que se coma un mono. Me da igual que te parezca estúpido, a lo mejor mi semilla germina en él y luego -con perdón- caga ciruelobananas. ¿Y por qué no?
Son las dos menos veinte, menos dieciocho y un, dos, tres... Ni Freddy viene a por ti. Es triste.
A veces mi dentista me habla mientras empasta... Y esto es lo que nos lleva al principio; me preguntó qué quería estudiar y le conté mi fructífera (de fruta) idea. Se atrevió a llamarme incoherente y revisó la dosis de anestesia.
Si no pudiera ser esto -hola de nuevo-, ¡entonces me llamaré Juanito! y me convertiré en flor. De color azul, como un escarabajo fiestero. Todo esto para extinguirme felizmente enredado en el pelo de alguna chica que, con algo de suerte, me guardara y plastificara mi cadáver de flor entregándome deliberadamente a la eternidad.                                                                                                                                                   Por los siglos de los siglos, Néma. Que es amén al revés. Corre que si no lo coges se te escapa.
Me gusta tu pulsera, niño. Me gusta mucho. ¿Qué pone? Es que no sé leer, ¡pero me gusta igual!  Así que brackets eh... No te preocupes, la Doctora Nieves es una profesional... No, yo tampoco entiendo por qué hace eso. Será que le divierte cómo intentamos responder anestesiados, con la subcionadora esa y sus manos dentro de nuestras bocas. No sé, no sé...
...solo es una teoría.

viernes, 15 de julio de 2011

.

- Eres mi mejor amiga... desde hace siglos. Pero hoy tengo que decirte algo... Espero que después de esto todo siga siendo lo mismo, de verdad. Sé que no vas a entenderlo pero...
- Estás asustándome.
- Tía... esque tenía que decirte que... de verdad que no quería pero... ¡¡YO BAILO MEJOR QUE TÚ EL PASO DEL PINGÜINO!!

lunes, 11 de julio de 2011

Carolina.

Carolina es una desordenada. Hasta tal punto que su hermano mayor dice que el cuarto de Carolina es como un agujero negro, lo que allí se acerca nunca vuelve a ser visto. Qué sabrá él, que acaba de volver,el muy inútil.
Carolina nunca encuentra sus cosas y detesta que le digan “claro, si estuviese en su sitio no tendrías que buscarlo”.
Y no es que no lo intente, es que simplemente no está en su genes y esto le trae bastantes problemas. A veces le echa la culpa al perro, odia a ese maldito chiguagua, pero nunca resulta.
Su abuela dice que es un desastre, y no va desencaminada. Para colmo ahora tiene que compartir habitación con su hermano pequeño. Creedme cuando os digo que esta chica es realmente desorganizada, tanto que tiene deshubicado hasta el corazón desde que vio al chico de sus sueños besar a otra y el órgano se deslizó para situarse en la planta de sus pies. Con tanto movimiento se le ha desordenado. ¡Lo que le faltaba a la pobre Carolina!
No piensa contárselo a nadie, además su madre no la escucharía y se limitarías a decirle que ordenara su habitación, ya sabéis eso de: ¿esto es un cuarto o una leonera?
Y ahora, como si fuese poco con el de su alrededor, está también llena  de desorden.
¿Pero como narices se recoje el dolor del alma? Carolina se colgó litera abajo, a ver si el corazón volvía a su sitio. Lo único que consiguió fue que su abuela le diese una buena charla: Pero que haces niña, vaya generación esta, no te das cuenta de que se te va a ir toda la sangre a la cabeza y te va a explotar?
Pensó que tampoco era mala idea como último remedio y empezó a buscar otras terapias para la rehubicación¿pero cuáles?
Carolina también tiene cosas buenas, no os creáis.  C es una soñadora, pero tiene los pies en el
suelo (menos cuando se sujetaba con ellos a la barra de la litera, claro está) y sabe tomar sus propias decisiones. Carolina puede contar a sus amigos con los dedos, y le sobran bastantes; pero es considerada amiga por la mayoría de la gente que conoce, que no son pocos.
Ella dice siempre lo que le pasa por la cabeza; y eso sí que está en sus genes. Por su padre, que no piensa dos veces las cosas antes de soltarlas. Que luego sus palabras tengan sentido es otra cosa, él lo deja ahí y que lo coja quien quiera, o quien pueda...
La silla de Carolina ha acumulado tanta ropa que ha amenazado con abrirse en dos. C tiene un móvil que usa más bien poco ya que siempre lo olvida en algún lugar de la casa, y luego no lo encuentra. No hay lugar para trivialidades tecnológicas en el desordenado mundo de Carolina.
Carolina te trata bien, siempre que no le cantes esa canción.
Ahora mismo, nuestra protagonista, debería estar recogiendo los converse que dejó en la sala hace dos días, el calcetín que olvidó esta mañana al salir de la ducha y el cupa-chup de cola a medio comer que reposa en algún lugar de la casa. Pero no puede, porque todavía está buscándose a sí misma.
Mierda C, has vuelto a hacerlo.
Carolina se ha perdido en sus propias letras y no quiere pensar en nada que no sea el chico que la ha trastornado hasta la médula. Y a ver que os digo yo de ella ahora.Carolina se enamora,sí, pero eso es un libro.
En realidad Carolina es una tía genial, y su desorden patológico también tiene ventajas. Es imposible que pierda el norte si no ha llegado a encontrarlo. Carolina vive regalando sonrisas a todo el mundo; el cartero, la vecina cotilla, la señora del estanco, los abuelos del parque...
Creo que C lo va a conseguir, organizarse un poco, digo. Apuesto que no lo hará sola, habrá alguien dispuesto a sujetarla boca abajo o a inventar estrategias para culpar al perro, si esto fuera necesario. Y es que eso es lo mejor de Carolina, que después de todo tiene encanto.

Me llamo Alicia, pero algo me dice que si mi madre leyese esto empezaría a llamarme Carolina.

sábado, 9 de julio de 2011

Mi telescopio no admite a los incrédulos, hace reales tus sueños pero no cumple deseos.


Aquella noche me llevó a la terraza para ver la luna. Él, más experto, conducía el telescopio y de vez en cuando me indicaba el nombre de las estrellas de alguna constelación.
Me separé del aparato para que pudiese enfocarlo hacia, según él creía, el planeta Marte.

- ¡Una estrella fugaz! Bien; Deseo que no nos separemos nunca.

Aquella frase hizo que me sintiera engañada y no pude evitar apartarle de mí. Ambos sabíamos que al cabo de un año él se iría, como en las películas, a vivir a Nueva York y nada sería lo mismo.
Me miraba inquisitivamente, y yo sabía que pronto lo adivinaría aunque no yo no me pronunciase al respecto.
- No ha habido ninguna estrella.
- Sí, solo que ha pasado muy rápido... ya sabes, FUGAZ.

Aun reía cuando se acercó de nuevo a mí. Ahora estaba realmente indignada, mi mejor amigo se iría y no había forma humana de evitarlo. Seguía furiosa.- La habría visto. -Le espeté y mi hostilidad era casi palpable.
- Bueno.. ¿y a ti qué te pasa ahora?  
Vale... no había ninguna estrella pero ya verás que mi deseo se cumple.
Me pareció ver en él la ilusión de un niño cuando le entregan el helado por el que tanto ha pataleado. La imagen me hizo sonreír.
- ¿Ah, sí? ¿Cómo?
- Amiga mía, ¡este telescopio es mágico! Una vez al año, cuando la luna está llena...
- Menguante.    -sonreíamos ya de oreja a oreja-
- Eso.. ¡menguante!, los deseos se hacen realidad.
- No sé cómo hacerlo...
- Es fácil, mira -tomó mi mano y la colocó sobre su pecho- ¿lo sientes? Ahora solo tienes que cerrar los ojos y pedir tu deseo.
- Abrázame. (...)
¿Puedo pedir otro deseo?
- Tantos como estrellas ves en el cielo.
-  No me sueltes nunca, porque si lo haces voy a extrañarte siempre.

Se separó unos centímetros que a mí me parecieron un abismo. Me apartó el pelo de la cara y miró de nuevo al cielo. Se tomó su tiempo antes de responder.
- No lo hagas.
- Tenía que intentarlo, ¿no?
- Supongo que sí. (...)
- ¿Quién te ha dicho que dejes de abrazarme?


Y mientras respiraba de su aire me susurró que me mandaría una postal cada mes y que ya sabia que nunca le había gustado hablar con una pantalla.
No comentamos nada más hasta después de un buen rato.Fui yo quién rompió el silencio.
- Creo que te han timado, ese trasto no es mágico porque al final, como en la canción, el telescopio no puede hacer realidad mis deseos.
Besó suavemente mi mejilla y me dedicó la más bella de las sonrisas.

- ¿Qué canción?
- La qué cuenta como acabó nuestra historia cuando te fuiste a la otra punta del planeta.

lunes, 4 de julio de 2011

AMOR son palabras mayores.

¿Qué te hizo pensar que dependía de ti? A ver, ¿por qué iba yo a 'enamorarme' del chico más imbécil de la ciudad?
Sí, te quería y eso lo sabemos todos. Pero, en serio, ¿tan creído te lo tienes? Venga ya...
¿Qué te hace creer que tienes derecho a estar celoso? De veras que no te entiendo. Si hubieses sido un poco más... tal vez un poco menos idiota... A lo mejor podríamos haber sido algo, poco más que una historia de verano, tampoco te creas.
Pero a ver, chavalín, ¿por qué no te aclaras? No es que me importe mucho, pero no se puede ir así por la vida.
Si quedaba algo de cariño en mí te lo cargaste del todo cuando me restregaste a esa chica que "está buenísima, joder". Y ala, que si ella te quiere y te considera lo más bonito de su vida te la suda, ¿no?
Hipocresía señores, cuando te ofendías si te soltaba que no eras la excepción.
¿A cuento de qué me cuentas tu vida? No vas a ponerme celosa, ni me voy a tirar a tus brazos... te lo digo desde ya para que duermas tranquilo.
¿Por qué haces esto ahora?  Tío, déjalo ya e intentemos quedar como amigos. Además, te agradecería que dejases de intentar resucitar lo nuestro porque, básicamente, yo no estoy muerta y esto no es Thriller.

I; nunca, repito nunca, se llora por desamor.

- ¿Qué sientes?
- No sé, es como si me fuese a explotar el alma de un momento a otro. No es dolor sino vacío... Es  saber que le has abierto el corazón a un completo idiota y no poder remediarlo.
- Amiga, eso es amor.
¿Pero qué le hiciste cuando te dijo que no había pretendido hacerte daño?
- Le miré a los ojos y dije: <<Tranquilo, que tíos para follar nunca faltan>>.
- Amiga, eso son un par bien puestos. ¿Y después?
- Recordé la regla número uno... y te llamé.
- ¡¿Solamente?! Tendrías que...
- ¿Haberle roto la cabeza? Total, para el uso que le da...
- Si se te vuelve a acercar te juro que le amputo el miembro.
- Ey, recuerda la segunda norma...
- NO EXISTE ¬¬
- ¡Pues ahora sí!; II: la venganza y el odio no conducen a ningún sitio.
- ¡Venga ya! Si ese intento de chico es un...
- Bueeeeno... lo consultaré con el comité.
(risas)
- Tía, ¡estás loquísima!... digo, ejem, ¿cuál es el veredicto?
- El comité considera que el sujeto merece una excepción de la regla número dos.
- ¡BIEN!
- Sin amputaciones *
- Tía... eres lo mejor.
- Somos lo mejor*

miércoles, 29 de junio de 2011

like bipolar, you know? :(:

 Benditos los abrazos cuando son tuyos;
porque me llenan y me hacen flotar;  el placer de oír tu respiración;
por el calor o el frío de tus manos y la ilusión de tenerte.
En serio, me encanta cuando me abrazas.


Malditos los abrazos si vienen de tí;
si me abordas por sorpresa y estos me colman de ese frenesí tan absurdo.
Porque me agobia el constante sube y baja de tu pecho y lo gélido de tus manos en mi espalda.
En serio, detesto como me abrazas.

martes, 28 de junio de 2011

¿hablamos claro?

No eres el más guapo, pero casi. No eres listo, pero casi. No te amo, pero casi. No tienes el mejor flow de la ciudad, pero casi. No eres gilipollas del todo, pero en ocasiones casi. Si no estás conmigo no soy feliz, pero casi. Si hablamos durante horas no me duele la cara de tanto sonreír, pero casi. Tus ojos casi son los más bonitos del mundo. No, no eres raro, pero casi, y eso sí mola. Estás a poco de irte de la olla. No tengo ni la menor idea de por qué has echo eso, pero casi me muero. Quería decirte todo esto, pero casi mejor no. He estado a poco de ir a buscarte, romperte la cara y después besarte, pero ha sido solo eso, casi. Casi tengo la esperanza de que no me estoy estrellando de nuevo.
¿Sabes? Estoy cansada de no decir las cosas importantes, de que oír 'por poco no lo conseguiste' o 'tendrías que haberlo echo'.
Esta vez tenía que decirlo porque eres tú, porque no soy normal, porque quien no arriesga no gana y sobretodo porque te quiero y quiero que lo sepas tú y el resto del mundo.

domingo, 26 de junio de 2011

sont les nuits

Acúestate niño, que es tarde.

' ¿Se acabaron las hogueras? ´

Pues claro, ahora la gente se está emborrachando. Que te acuestes, he dicho. Que es la una.
¿Qué haces ahí parado, hijo? Te estoy diciendo que te acuestes.

' Ya estoy durmiendo '           ...
' ¿Quién es usted, señora? ¿y por qué me sueña? '

¡Válgame dios!, ¿qué clase de generación es esta? Si yo te digo que te vas, tú obedeces, además ¿qué tonterías dices?

' Despiértese señora, que buena falta le hace. '

viernes, 24 de junio de 2011

LO QUE FALTABA, YA.

Pues eso, que estaba yo tranquilamente dándome una vuelta por vuestros blogs cuando me topé con un plagio del copón en uno de ellos, y digo yo, que si te haces un blog, al menos escríbelo tú mismo o  dí de dónde lo has sacado, en fin, como me enseñó mi abuela, se dice el pecado y no el pecador, y no pienso darte publicidad.
Mi mejor amigo dice que tengo que estar orgullosa, que quiere decir que está bien el rollo, pero es que estoy seriamente indignada._______.
En fin, que decir a esto... que me importa bien poco si no sabes, no puedes o no te apetece escribir, así que si os aburrís algún día y se os ocurre hacer esto os recomiendo que salgáis a mirar un rato el cielo, que para eso está ahí, ofreciéndonos sus trescientos mil  colores (:

jueves, 23 de junio de 2011

Pregúntame ahora cómo estoy.

Quiero decírtelo, joder, quiero soltarlo y no puedo.
Ir a buscarte y gritarte que te lo dije, que no somos tan parecidos, que mentiste o has cambiado demasiado. Que no te quiere, y no te das cuenta... que ya veremos lo que pasa cuando llegue septiembre.
Que echo de menos las horas hablando, cuando no te importaba poner un corazón o dos, que te llamase por tu diminutivo o por tu nombre, cuando decías que te hacía sentir mejor.
Cuando parecía que solo existías tú y se me olvidaba todo... cuando me costaba admitirlo pero te consideraba parte de mi vida, cuando intentaba explicarle al mundo que te quería como nunca a nadie, pero solo como amigo, y no me entendían.
Cuando me comía la cabeza pensando en qué decir para sacarte una sonrisa... cuando conseguí que cambiases un poquitín por mí, aunque fuese aquel mínimo detalle. Cuando nos pasábamos y nos mandábamos a la mierda, cuando descubríamos más y más cosas en común, cuando yo arriesgaba mi vida social y la integridad de mi cara por quedarme hablando contigo o cuando te quedabas hasta las tantas para hablar conmigo, cuando estabas jodidamente mal y yo lo sabía aunque intentases disimularlo.
Cuando decidí confiar en tí, cuando insistí en que me llamases, cuando decías que éramos únicos en nuestra especie, cuando te enfadabas si decía que no lo éramos, cuando  lo hacía yo y no aguantaba más de diez minutos, cuando no hacía falta sacar temas de conversación, cuando nos perdonábamos los golpes bajos, cuando aprendiste a reír...

Joder, cuanto te voy a echar de menos...

martes, 21 de junio de 2011

¿R de rumba? No, R de REVOLUCIÓN.


Dificilmente encuentras a gente consciente del paso del tiempo; seguramente no te has parado a pensar que hoy es el primer día del resto de tu vida, y con razón, habrá que aprovecharlo.
No te haces a la idea de la fragilidad de las situaciones hasta que pasa algo que lo cambia todo.
¿Alguna vez os han despertado un un jarro de agua fría? Demasiado de película...
¿Habéis comido helado tan rápido que se os enfría el cerebro? 
Quizá os hayáis incorporado bruscamente y todo se os ha hecho oscuro durante unos segundos. 
Ahora intenta imaginarlo todo a la vez y multiplícalo por diez.
¿Cómo se siente uno ahí abajo? Lo diré yo;
Estás mojado y el frío no te deja pensar. No puedes ver más allá de unos metros y camines o corras no haces más que seguir tus propias huellas. 
Donde estás hay muchos más en tu situación, dedicados a repetir un puñado de palabras, convirtiéndose así en eco unos de otros mientras fingen disfrutar de sus rutinas.
Cuando descubres que eres un pez fuera del agua puedes asimilarlo de dos maneras:
1. Estoy solo en el mundo, nada tiene sentido.
2. Que los penetren a todos, no voy a ser como ellos.
Después de pasar por ambas todo sigue siendo una mierda pero si lo tomas con filosofía puede ser divertido intentar cambiarlo en una sociedad en la que si no están ciegos cierran los ojos.
Supongo que es algo parecido al amor, que desde que te la dan una vez empiezas a ver infidelidad por todos lados.
Si alguna convicción me queda es que no voy a quedarme de brazos cruzados. El mundo necesita que cambiemos por él y mientras la revolución comienza yo sigo sin saber qué sería más útil para la sociedad del futuro, que estudie oftalmología o psicología.

lunes, 20 de junio de 2011

Retales.

1) Niñatas que creen que el mundo gira a su alrededor,
que intentan llamar la atención como sea,
que necesitan que las miren para sentirse superiores, valoradas.
Niñatas que se sienten adultas y que van por ahí creyéndose Ángeles caídos del cielo.
Y tienen razón, tuvo que ser un golpe importante caer desde tan alto.


2)No, no, no.
Sé que duele, lo sé. Pero no quiero que estés así porque no te lo mereces, porque vales muchisimo más que esto, porque puedes superarlo y porque para eso me tienes y tendrás a mi.
Quiero verte llorar, pero de alegría y quiero que sonrías y me hagas sonreír como has hecho siempre.
Y es que no quiero que te pierdas porque soy una egoísta y no sabría que hacer no estás.
Porque no podré evitar que te hundas, pero me hundiré contigo para coger impulso juntos desde lo mas profundo y poder volver a reír y abrazarte cuando lleguemos arriba y veamos a los que nos hirieron tan pequeños...
Joder, no sé si me duele a mi más que a ti esto, pero si que sé algo con certeza, TE QUIERO, vivo, contento, como siempre.

3)Y si ahora desapareces, te evaporas como mi ilusión. Si tú, mi único apoyo te vas, ¿qué hago?.
Aunque duela decir esto, eres lo único que de verdad tengo, o eso creía...
¿Habré sido solo una más?, ya no lo creo tan improbable, yo no soy ningún juguete, tengo sentimientos.
Quizá no sean ellos, seré yo. Al fin y al cabo nunca he tenido amigos.
No sé por qué me empeño en cerrar los ojos, en omitir lo que hace daño. Al final viene todo de golpe y es entonces cuando me doy cuenta de quien sí y quien no.

4) Esa sensación de libertad, de haber hecho algo porque sí, porque apetecia.
Porque era importante y necesario; el miedo se evapora cuando dices SÍ a lo que quieres y te despides de el qué pensarán, dirán, harán...
Solo porque así lo queria, y, por una vez, así fue. Solo porque puede que esto evite algo, solo porque puede hacer que te vuelva a ver.
SOLO porque te quiero <3!

5) Hay quien dice que no valoramos lo que tenemos hasta que lo perdemos. Si te paras a pensarlo te das cuenta de que no es así porque ¿Cuánta gente desaparece de tu vida? ¿lo consideras una pérdida? La respuesta es no. No nos duele cuando “se va” cualquiera; solo cuando esa persona es realmente importante y por lo tanto la valoramos y cuando la perdemos o nos pierde no la valoramos más, solo nos damos cuenta del papel que desempeñaba en nuestro día a día, y aparece el vacío, el de la ausencia.
Entonces, ¿no sería todo más fácil si no nos implicásemos con nadie? No lo sé, pero debería haberme dado cuenta de esto hace tres meses y no dolería ahora.
Todo seria más sencillo si nos centrásemos en el presente, si siguiésemos un lema. Algo parecido a love me today, forget me tomorrow. Pero el corazón no entiende de lemas, ni de tiempo, y mucho menos de distancia, debe ser por eso que te quiero y que pondría del revés el mundo para volver a verte.
Pues la verdad es que esto es un asco, ¿por qué nos afanamos en crear lazos con la gente? Todo se centra en que mientras mayor sea la unión más dolorosa será la ruptura y cuanto más dependemos de alguien más duro es cada momento sin esa persona.
El dolor está ligeramente compensado con el saber que esto nos pasa a todos. Ya sabes ¿no? Mal de muchos…
Termino pensando en el futuro, ¿conseguiremos controlar los sentimientos? Sin duda todo sería más fácil pero quizá demasiado simple, demasiado frío si al fin y al cabo es esto lo único que nos diferencia de los robots.

sábado, 18 de junio de 2011

perversión del lenguaje.

En mi opinión  ' hasta siempre ' no es más que la versión políticamente correcta de ' hasta nunca y ahí te pudras'

sábado, 21 de mayo de 2011

Do you know?

Para escucharte, socorrerte, abrazarte, mojarte y despeinarte; para consolarte, burlarme de tí, sonreirte, animarte, esperarte y despertarte; para espavilarte, sacarte, enfadarte, seducirte y enloquecerte; y para amarte me tienes a mí.

Para todo lo demás,yo que sé.. mastercard.

Algo así como

- tener frío-              
                                             
                         - y que nadie te abrace.

viernes, 15 de abril de 2011

Stupid, maybe?

A veces es difícil decir que no más, pero hay momentos en la vida en los que hay que luchar.



Quizá siempre he fallado en lo mismo, tal vez debería luchar aún más pero ¿a costa de qué?
¿Dónde está el límite?  ¿Acaso estaría bien hacer daño a otros para conseguir lo que tanto quiero?
Una vez pregunté esto y me respondieron:
- El mundo es así, para llegar arriba hay que escalar. Sé por una vez egoísta, piensa en tí.

¿Que qué hice?  Nah, yo no soy así.

en realidad te quiero.

¿De verdad tú y yo estamos formados por la misma materia?

Esque eres tan... imbécil.

I am who I am.

- Extrange -

No soy la típica nada pero tampoco una gran innovación. Soy lo que se dice, eufemismos aparte, un bicho raro.
   Te preguntarás por qué y no me limitaré a esos tan escuchados: es que no soy como los demás. La diferencia entre todos esos y yo es, simplemente, que yo no intento serlo.
Esto no es un manual de "Como ser tú mismo en tres meses" y carece de segundas intenciones. Es solo que hacía tiempo que quería decir esto, todo se reduce a la naturalidad, y a mí me encanta ser así, yo misma.


Bienvenido al 0.000001% de lo que soy (y no soy)
No poseo una sonrisa amable las 24 horas, mis ojos pueden matarte, hacerte reír o conseguir que te sonrojes pero no tienen ningún color poco común. No alargo mis pestañas con toneladas de rimel para que te fijes en mí y llevar decentemente una falda no es prioridad en mi lista de 'Cosas que debería aprender'.
No tengo de eso que llaman sentido del ridículo, puedo ponerme a cantar entre la multitud para hacerte reír, pero no tocar "Bendita tu luz" con la guitarra.
Sobra decir que no debes contar con que mi pelo se mantenga aceptable más de diez minutos.
Cuando quieras darte cuenta de lo mucho que te quiero ven y abrázame, pero no me pidas que lo escriba en un papel adornado con corazones púrpuras.
 Y aunque sueño con un 'nosotros', no me considero capaz de enamorar a nadie.
Si me sorprendes observándote no bajaré la mirada, ni me haré responsable de las sonrisas semi torcidas que puedan dibujarse en mi rostro.
             Cuando hablamos sigo siendo yo y digo tantas tonterías como de costumbre, soy tremendamente torpe y no es algo que me preocupe.
Si me caigo delante tuya no saldré corriendo, ni pediré que me ayudes a incorporarme, creo que me quedaré en el suelo riéndome hasta la asfixia de lo hábil que soy.

Y por todo esto nunca seremos dos, porque tú buscas una chica adorableque te siga el juego de quien quiere más a quién, que viva para enamorarte y te diga lo mucho que te ama cuando llevéis dos días, que piense en tí y tiemble, alguien cuya felicidad dependa de si la miras o no.
Si algo tengo claro es que No seré yo la chica que intente conquistarte.

lunes, 14 de marzo de 2011

¿¡Hola!? ; Prefacio.

- Buenos días princesa, ya es la hora.
- ¡Oh! - prácticamente salté de la cama, agarré los libros de la cómoda y corrí al cuarto de estudios. De acuerdo, 06:40 h de un lunes, plan para hoy:
* Correr
* Estudiar
* ¡¡Tres exámenes!!
* Sobrevivir...
* Volver a verle (;
Visto así no parece tan malo. ¡Guay! me he levantado optimista.
No sé si me quité el pijama o me lo arranqué, pero me dispuse a meterme aquellos vaqueros y aquella camisa que segundos antes descansaban sobre el sofá, ajenos a lo que les esperaba hoy. Y en eso estaba, tratando de poner el zapato en mi pie en una postura un tanto amorfa cuando llegó mi madre, como cada mañana, recordándome que tenía que desayunar.
Tomé un vaso de leche tan rápido que me sobrevino un acceso de tos, pero lo paré de manera tajante y dije para mi misma que no había tiempo para nada.
- ¡Genial! me he dejado la coleta en mi cuarto. - Cosa extraña porque suelo llevar una en la muñeca,- Buenos días tío que maneja el mundo, ¿te he hecho yo algo?
Dejé de hablar con el infinito y me dispuse a realizar la operación Recuperación del moño , devía ser sigilosa y rápida para no despertar a mi prima, que dormía por allí entonces. Ella no se levantaba tan feliz como yo, nunca entenderé como puede haber tanto mal genio en un cuerpecillo como el de Jade.
En fin, conseguí coger mi coletero y me dispuse a amarrar las greñas mañaneras. Como es natural en mí no elegí el modo común, me acosté en el sofá y dejé que mi cabeza colgara de uno de los extremos, la gravedad hizo lo suyo y yo sujeté mi pelo en la altura y posición adecuadas. Todo bien. El fallo estuvo en la velocidad de incorporación, ajá, sí, me mareé como un pato y, no sé de que manera, terminé hecha una bola sobre el parquet.
Entonces mi subconsciente se devatió entre espavilarse y seguir el plan o dejar que mi mente volase hasta el recuerdo de la noche anterior, cuando me dí una relajada...¡FAIL! ¿qué digo? Aquella noche había sido un caos, las prisas para repasar todos los apuntes, cenar, ducharme, la insesante sensación de prisa, sin olvidar lo incidentes...
Rap, agua caliente y burbujas... me habría quedado allí horas pero, cómo no, tenía que estudiar así que mi ducha no llegó a los diez minutos. Cuando salí intenté enrollar mi pelo chorreante en una toalla (como hace todo el mundo) pero no me debió salir bien porque de repente, mientras releía sentada en mi cama los apuntes de Ciencias, la toalla se desprendió cayendo sobre las hojas.
A toda prisa intenté quitarla para que no mojase más mis escritos y devolverla al lugar del que nunca hubo haberse resvalado, pero bolqué el yogurth que descansaba sobre la mesilla y este comenzó a derramarse sobre mis sábanas de florecitas.
- Geniaaaaaaaaaaal.- Grité resignada mientas ponía en vertical el bote plástico suficientemente lejos del alcance de mi codo, por si acaso. Después me lancé hacia el baño para coger toallitas húmedas y quité el líquido de fresa de la tela. Hay que decir que no cayó mucho gracias a mis reflejos .
Tras un rato repasado los resúmenes sujetándome la toalla decidí quitármela y fué lo único que hice bien anoche...
- ¡Eeeý! Hola, son las 07:05 h y sigo tirada en el suelo, correeeeeeeeeeeeeer.
Mientras me bebía el zumo pensaba en que si llegaba temprano podría desviarme un poco (en relidad estaba en la otra punta) y pasar por delante de su clase, por si lo veo...
Apuré mi bebida y el resto es historia, el tema cinco y el seis para ser exactos.

viernes, 25 de febrero de 2011

Si, vale, se que os tengo abandonados...
Os dejo un par de fotos para compensar :) 






Me preocupa lo que callas, no lo que dices...



La naturalidad es la más difícil de las poses.

jueves, 10 de febrero de 2011

Seis.

Es curioso como en los mejores momentos de mi vida no se me ocurre nada que escribir y sin embargo en días como hoy el cuaderno parece llamarme a gritos.
¿No os parece egoísta? A todos nos gusta, o necesitamos, compartir las alegrías, pero cuando lo que nos ocurre es malo somos capaces de recordarlo y asegurarnos de que el resto lo tenga presente durante meses o incluso años.
   Y en eso estamos hoy, o estoy yo sola porque no es algo que haya querido transmitir a los que me rodean. Quizá ya sea el momento de hacerlo.
 La verdad es que después de haber maquillado emociones y disimulado altibajos durante todo este tiempo creo que no lo he hecho nada mal.
 Seis meses, medio año, unas veinticuatro semanas, y dicho así suena a poco.
Quiero que imagines que por cada letra que escribo tengo una imagen y un minuto perdida en su ausencia o disfrutando de su recuerdo.
Y no, no ha sido fácil, bah; no voy a hablar de lágrimas a estas alturas y además, los monstruos no sabemos llorar.
¿Pero por qué no expresar de una vez esto?
Sí, le quería y le quiero, pero no es lo que han pensado todos a quienes he intentado explicárselo. No es amor, ni siquiera puede llamarse amistad.
Admito que incluso yo confundí sentimientos y que se me aceleraba el corazón si pensaba en él, pero ahora, con el tiempo todo está claro. Para que alguien a parte de mi lo entienda lo llamaré confianza.
La que tan difícil de dar era para ambos y que sin embargo nos regalamos sin miedo alguno.
Y cuando digo confianza no me refiero a esos secretos incontables ni a poner mi vida en sus manos. Hablo de libertad, del hecho de que fuese la única persona con la que fui yo misma. Sin cerrarnos para evitar un golpe, gritando sentimientos y compartiéndolos, olvidando el entorno y sus absurdos juicios.
Si me apetecía abrazarle lo hacía, y si quería llevarse mi alma solo tenía que hacer un gesto. Y él lo sabía, pero no lo hizo.
Pero durante mucho tiempo pensé que yo ya no era nada, que me había dado la vida para llevársela después, que tres horas en barco separaban mi alma de mi cuerpo.
Y ahora sé que me equivocaba, pues él solo se llevó promesas, no de las que juran eternidad, sino de las que se cuentan con la mirada porque dos almas que son una no necesitan palabras.
No sé si me recuerda y tampoco si voy a volver a abrazarle pero al menos siento que hice lo correcto. Puede que algún día vuelva a obedecer a mi corazón en lugar de guiarme por el miedo. Tal vez dentro de otros seis meses, cuando vuelva a verle y deje de dolerme sentir que conforme se deterioran sus recuerdos muere una parte de mí.